1. Ante todo, Conócete
Es importante que te conozcas, a veces nos parece que es así, pero no sabemos tanto de nosotros mismos.
La pregunta para saber cuánto sabes de ti, sería ¿qué dirías de ti? Reflexiona sobre esta cuestión, ya que no se trata de hablar de uno mismo como lo mejor del mundo, pero sí de dar a conocer a otros una versión acertada de nosotros mismos, de forma clara, concisa y realista.
Olvídate del exceso de aderezo en el lenguaje, lo simple es compresible, lo recargado es disperso.
Si te es complicado, pregunta a tus amistades, como te ven, que diría de ti si tuvieran que presentarte a un buen amigo, así puedes tener pistas sobre cómo te ven los más cercanos y si coincide con lo que tú ves de ti.
2. Desarróllate
¿En qué eres buenx?
¿Qué te gustaría aportar a los demás?
¿Cuánto de fácil se te da algo?
Aquí tienes que detenerte y reflexionar porque a veces, muchas veces, aquello que se nos da fácil le restamos valor. Y lo que tienes que pensar es que puede que para ti sea fácil, pero para otros no lo sea, ahí estará tu don, tu diferenciación, tu punto de elección.
3. Lidérate
¿Eres consciente de dónde estás en realidad?
¿Sabes hacia dónde quieres ir?
¿Tienes medios para conseguirlo?
¿Tienes capacidad de contagiar a otros?
¿Has pensado en por qué eliges lo que eliges?
¿Sabes empoderar a las personas?
¿Te respetas a ti mismo?
¿Tienes en cuenta las emociones de las personas, sus momentos, sus prioridades?
Estas preguntas te orientarán en reconocer tu capacidad de liderazgo, para ello necesitas contar con una buena dosis de autocontrol, serenidad, claridad y coraje.
La dosis adecuada es difícil de definir, ya que cada persona tiene sus sueños y un cociente energético que le ayuda a conseguir aquello que sueña.
La pista sería ¿en qué piensas más?, ¿dónde está tu atención?, porque allí donde está tu atención, está tu intención.
Aprender a liderarte a ti mismx primero tiene que ver con:
Cuestionarte aquello en lo que siempre has creído
Conocer tus debilidades, manías, obsesiones...
Conocer tu visión de futuro
Saberte emocionalmente justx, equitativx, honestx y coherente
Te mueve aquello que amas (entusiasmo, pasión, optimismo, determinación)
Conocer como las personas quieren ser respetadas.
4. Transfórmate
NO SUPONGAS, pregunta
NO ATAQUES, pregunta
NO TE TOMES NADA PERSONAL, pregunta
Como ves, preguntar es la base de toda resolución de conflictos, de todo avance y comprensión ya sea en lo profesional como en lo social y personal.
La pregunta educada, a tiempo y empática siempre da buen resultado. Te ayuda a desarrollarte en todas las áreas. No temas preguntar, es mejor parecer tonto que serlo. Y al fin y al cabo es todo cuestión de quién opine sobre ti.
Sé valiente y transfórmate y todo cambiará contigo.
5. Lánzate
No hay nada más poderoso que una acción. Es difícil saber si una acción va a dar buen resultado, pero solo hay una forma de averiguarlo, actuando.
Importante no llevar a nadie, ni a ti mismo al abismo por una acción mal planteada, improvisada o descabellada, pero es de vital importancia que una vez evaluados pros y contras tengamos el arrojo y determinación para pasar a la acción, ya que se pierde demasiado tiempo evaluando, planificando o diagnosticando. Evidentemente estos 3 puntos son importantes, pero definir el plan de acción no se ha de eternizar. Hay muchas empresas en las que el tiempo de análisis es tan alto que pierden su momento.
Buscar los contras para contar con un plan B, y pasar a la acción de forma rápida, ya que el tiempo no espera por nadie.
No le des muchas vueltas al chicle, porque deja de tener sabor y los planes que se alargan pierden motivación y valor.
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